El año pasado, Tiffany dejó su espaciosa casa de alquiler por un apartamento compacto más cerca del centro. Aunque tenía una ubicación ideal, el apartamento ofrecía un espacio limitado, no solo para cosas, sino también para actividades. En su antiguo lugar, a Tiffany le encantaba recibir invitados ocasionales; para hacer lo mismo en sus nuevas excavaciones comparativamente estrechas, tendría que ser creativa. Después de semanas de lluvia de ideas, se le ocurrió la idea de lo que se convertiría en un mueble de bricolaje equivalente a una navaja suiza.
Es un rincón de desayuno. Es un área de comedor, escritorio y área de proyectos. Son todas esas cosas. Es genial. Aquí, en una esquina de su apartamento, Tiffany creó una zona soleada y versátil en la que hacer todo lo que temía que no hubiera espacio suficiente. ¿La mejor parte? Una vez que descubrió el diseño, el resto fue fácil. Tiffany gastó menos de $ 200, pero teóricamente, podría reducir los costos al mínimo optando por soportes para estantes de bajo costo y un par de taburetes de segunda mano.
Puedes leer, en las propias palabras de Tiffany, cómo lo hizo. Pero aquí está la esencia: después de haber medido cuidadosamente el área de la ventana, Tiffany decidió las dimensiones deseadas para su mesa. A continuación, reunió materiales que incluían dos tablas cortadas al ancho correcto. Como quería que la mesa tuviera algo de peso, decidió doblar las tablas, colocando una encima de la otra. Con pegamento para madera, unió las tablas, aplicando presión mientras el adhesivo se fijaba. Luego aseguró el vínculo con tornillos.
¡Tiempo de soporte! Para determinar la altura correcta de los soportes que sostendrían el tablero de la mesa, Tiffany se sentó en uno de sus taburetes y marcó donde sus rodillas tocaban el borde de la ventana. Ahí es donde, con un par de pulgadas más para espacio para las piernas, taladró los soportes. A continuación, colocó el tablero de la mesa en su posición sobre los soportes, luego atornilló los dos juntos desde abajo, agregando estabilidad. Por último, Tiffany terminó las cosas con una cera suave que realmente resalta los nudos y la textura de la madera.
PARA MÁS: Poco convencional e inspirado