Cómo limpiar una alfombra con nieve - Consejo rápido

Anonim

Antes de sacar su alfombra al aire libre en un día frío después de una tormenta de nieve, primero aspire la parte delantera y trasera. Alternativamente, agite bien la alfombra, liberando toda la suciedad y los escombros sueltos. A continuación, deje que la alfombra se asiente afuera y se aclimate a la temperatura durante unos 30 minutos. ¡No omita este paso! Hay dos buenas razones para el período de espera: una es que esta exposición al clima helado hará que la grasa y la suciedad acumuladas en la alfombra se endurezcan y se rompan. Igualmente importante es que, una vez enfriada, es poco probable que la alfombra derrita la nieve sobre la que pronto se posará. Eso es fundamental, porque si la alfombra se calentara, este proceso la dejaría un desastre húmedo.

Así que una vez y solo una vez que la alfombra esté bien y fría, continúe y colóquela boca abajo en la nieve. A continuación, esta es la mejor parte, procede a batirlo con una escoba o rastrillo o lo que tengas a mano. Si lo desea, simplemente puede caminar de un lado a otro sobre la alfombra, pero es mejor usar una herramienta de mango largo. No querrás aplastar la alfombra en la nieve. En cambio, el objetivo es crear vibraciones entre el tejido y el suelo nevado. Cuando se canse, dé la vuelta a la alfombra y repita el proceso.

Finalmente, levante la alfombra y llévela de regreso a su terraza, porche o patio. Sacuda todo el exceso de nieve que pueda, luego cuélguelo con pinzas para la ropa o dóblelo sobre una barandilla. Déjelo por unos 30 minutos. Ese debería ser tiempo suficiente para que la nieve dentro del tejido de la alfombra se convierta de nuevo en vapor de agua. Cuando vuelva a colocar la alfombra en su lugar en el interior, podrá admirar sus colores renovados y el hecho de que, si bien puede que se haya visto peor, ahora parece prácticamente nueva.