
Es un dilema antiguo: buscas un frasco de encurtidos o salsa de tomate pero, por más que lo intentes, no puedes hacer que la tapa de metal se mueva. Además de simplemente buscar la ayuda de alguien más musculoso, ¿existen otras formas infalibles de abrir un frasco atascado? Absolutamente. Puede omitir la llamada telefónica a su vecino de al lado culturista, porque la solución está al alcance de la mano. De hecho, en la mayoría de las cocinas, existen al menos tres métodos fáciles y efectivos para abrir la tapa de cualquier frasco rebelde. Desplácese hacia abajo ahora para aprender los secretos simples.
Agarrar

La próxima vez que necesites abrir un frasco atascado, haz del caucho tu aliado. De hecho, prácticamente cualquier cosa hecha de goma puede ofrecer el agarre que necesita para dominar un sello hermético. La cocina promedio esconde una serie de artículos de goma a la vista. ¿Nuestro enfoque favorito? Colóquese un par de guantes de goma para sujetar mejor y de forma más persuasiva el frasco. Alternativamente, busque bandas elásticas en el cajón de basura y envuelva una alrededor de la tapa varias veces. En caso de apuro, incluso puede usar un revestimiento de goma para estantes.
TRATAR CON CUIDADO

Con cinta adhesiva, puede abrir un frasco atascado en solo uno o dos minutos. Así es como funciona la estrategia: corte aproximadamente un pie de cinta adhesiva y luego alinee el borde inferior de la cinta con la parte inferior de la tapa. A continuación, envuelva la cinta tres cuartos alrededor de la tapa y doble el resto de la tira por la mitad, a lo largo, formando una especie de tres cuartos de cinta alrededor de la tapa, formando una especie de asa improvisada. Finalmente, sostenga el frasco con una mano y tire del “asa” con la otra. ¡Presto!
DESPEJAR EL CAMINO

Algunos frascos son bastante fáciles de abrir la primera vez, pero bastante difíciles de volver a abrir, como los frascos de miel, por ejemplo. Esto se debe a que su contenido pegajoso se aloja entre el frasco de vidrio y la tapa de metal, cerrando el recipiente con pegamento. El truco consiste en llevar el frasco al fregadero de la cocina y mantenerlo bajo agua tibia o caliente hasta por 60 segundos. El agua elimina al menos parcialmente cualquier sustancia que pueda estar sosteniendo la tapa en el lugar. A partir de ahí, simplemente limpie la tapa y gírela firmemente.