Se necesita una enorme cantidad de agua para mantener lo que muchos considerarían un consumo doméstico modesto. Imagínese una rutina familiar que implica duchas dos veces al día, un par de cargas de ropa por semana, 15 minutos al día lavando platos y 10 minutos en el grifo. Lo crea o no, según el Southwest Florida Water Management District, ese hogar usa 192 galones por día en promedio.
¡Toda esa agua no tiene que irse por el desagüe! Cada vez más propietarios están instalando sistemas que desvían las aguas grises, es decir, los desechos de los fregaderos de la cocina y el baño, el lavavajillas, las bañeras y las duchas, hacia el jardín. Si bien algunos municipios imponen severas restricciones al uso de aguas grises, otros fomentan la práctica y ofrecen información para guiarlo hacia la instalación de un sistema exitoso.
Almacenamiento frente a agua directa
Al diseñar un sistema de reciclaje de aguas grises, básicamente tiene dos opciones: puede optar por que el agua se acumule en un tanque o barril (expuesto sobre el suelo u oculto bajo tierra), o puede hacer que el agua se drene directamente en su jardín. En cualquier caso, es aconsejable instalar válvulas desviadoras de tres vías en las líneas de drenaje que desea aprovechar. De esa manera, si ha llovido mucho o si su barril de almacenamiento está casi lleno, puede cambiar y enviar el agua a la alcantarilla o al tanque séptico. Tenga en cuenta que si recolecta agua gris en un recipiente de almacenamiento, querrá usarla antes de que el material orgánico que contiene comience a descomponerse y cause olores. Normalmente, ese proceso se produce en 24 horas o menos.
Gravedad contra bomba
Si su jardín se encuentra cuesta abajo desde su casa, entonces puede confiar en la fuerza de la gravedad para llevar el agua gris a donde debe ir. Ejecute líneas separadas entre la plomería de su hogar y el exterior o combine las diferentes tuberías en una principal que distribuya el flujo de salida.
Si su jardín se encuentra cuesta arriba desde su casa, necesitará una bomba para hacer el trabajo. Una todas las líneas en una sola tubería o contenedor de almacenamiento y conecte una bomba de efluentes (clasificada para manejar sólidos de hasta 3/4 de pulgada) para mover el agua a su destino.
En el jardín
Las aguas grises deben salir de la casa a través de tuberías de PVC de una pulgada. En exteriores, se recomiendan tubos de polietileno flexibles; puede hacer agujeros en ellos para regar partes del jardín. Alternativamente, instale salidas de plástico a lo largo de la línea en puntos clave de riego. Consulte las regulaciones de su código local para obtener detalles sobre la profundidad a la que se deben enterrar las tuberías; dos pulgadas es el estándar de California. Cubra la zanja con una capa de mantillo al grado del suelo.
Consideraciones adicionales:
- Asegúrese de que las mascotas y los niños no tengan acceso a aguas grises, ya que beberlas puede causar enfermedades.
- Ejecute sus líneas de una manera que evite que el agua se acumule en una sola área.
- Si planea regar con aguas grises, cambie a detergentes que no contengan sodio ni bórax.
- Los jabones en barra hacen que el agua sea más básica (no ácida); cambie a jabón líquido si sus plantas son sensibles.
- Evite los blanqueadores con cloro y las sales de baño, ya que ambos presentan riesgos en el jardín.